REPRESENTANTES DEL INADI VISITARON LA ESCUELA Nº 657 PARA INTERIORIZARSE CON RESPECTO A LA PROBLEMÁTICA QUE SE VIVE POR EL ACOPIO DE CEREALES ALREDEDOR DE LA INSTITUCIÓN.

La Dra Glenda Vanesa Seifert, concejal municiapl de Pampa del Infierno, dio a conocer a miembros del INADI la situación que la Escuela Nº 657 padece hace años y, hoy al mediodía, nos visitó el señor Nicolás Portillo, Delegado de ese instituto para la Provincia del Chaco, lo acompañaban el diputado provincial Raúl Acosta, el Pastor Miguel Cardozo, presidente del Foro de Pastores Evangélicos del Chaco y el señor Carlos Benguer, del Ministerio de Salud. Todos escucharon atentamente la problemática ambiental que padecemos y se pusieron a disposición para ayudar a encontrar una solución que consideran debe ser urgente debido a los riesgos a los que se nos está exponiendo al tener que pasar nuestras jornadas en medio del polvillo de cereales y los olores nauseabundos (todo esto lo sufren aún más los habitantes de la zona que deben convivir las 24 horas con esa realidad). El señor Portillo nos invitó  a presentar en breve la denuncia formal ante el INADI e insistió en que es importante que todo se divulgue para que la gente esté en alerta, especialmente en todo lo que tiene que ver con la peligrosidad de la cercanía de todas las actividades que, como el acopio de cereales, incluyan uso de agroquímicos. Todos se pusieron a disposición y dejaron sus datos para seguir en contacto.

El señor Benguer se comprometió a enviar información estadística relacionada con la salud de Pampa del Infierno para que se pueda hacer notar a la población pampeña la delicada situación que atraviesan, tal como lo advirtió hace meses el Comité de Ëtica del Hospital 4 de Junio... 

Los visitantes nos comentaron que hay en nuestro pueblo, dos casos comprobados de leptospirosis, y, mientras eso sucede, la población de ratas sigue creciendo sin que nadie haga algo para revertir la situación. Los ecoguardianes venimos advirtiendo sobre este problema porque en la escuela es una lucha constante, y todos sabemos los riesgos a los que estamos expuestos si esta situación continúa.

Así continúa nuestra lucha, a la que quisiéramos que más gente del pueblo se una entendiendo que el problema del acopio de cereales que no respeta las normas establecidas nos afecta a la comunidad de la Escuela Nº 657 y a los habitantes del Barrio Sur directamente, pero la población potencialmente afectada es prácticamente toda, ya que el polvillo es diseminado por todos lados a través del viento, está en el aire, en nuestros techos, y de allí, cuando ocurre el milagro de la lluvia va a nuestros aljibes... Todo problema ambiental es de todos, especialmente cuando el gobierno municipal parce no ver y no escuchar, porque no responde de ninguna manera a nuestras demandas, ni siquiera para pedirnos que dejemos de molestarlos.